Cambiar la disposición de los muebles realmente le regalará nuevos aires a tu salón. Sitúa los muebles más grandes en la pared más ancha y orienta la disposición hacia puntos focales, como una ventana o una obra de arte. Así, crearás la ilusión visual de un salón amplio y con mucho estilo.
Además, puedes basarte en los criterios del estilo que hayas elegido, ya sea minimalista, industrial, nórdico o clásico. Otra buena idea es que revises los consejos del Feng Shui para la nueva organización de tu mobiliario.
Utilizar decoración vintage o de segunda mano añade personalidad y un toque único a tu salón. Si exploras tiendas de segunda mano y mercadillos, encontrarás piezas muy particulares. Por ejemplo, vajilla de loza antigua tan encantadora que querrás lucir en el salón, baúles antiguos o afiches y pósteres originales de otras épocas. Son elementos que enriquecen la decoración con encanto y lo mejor de todo: no necesitarás gastar demasiado para adquirirlos.
Si disfrutas del bricolaje, construye e instala tus propias estanterías decorativas. Con algunos materiales básicos como madera o metal, puedes diseñar estanterías que sirvan para almacenar libros o mostrar objetos decorativos.
Pinta las estanterías en colores que complementen tu decoración actual para darle un toque contemporáneo a tus paredes. Si te gusta la idea, te recomendamos aprender sobre la chalk paint o pintura a la tiza, perfecta para este tipo de manualidades.
Si tu salón está separado de las otras habitaciones por puertas, llegó el momento de darles una lavada de cara. ¿Por qué no cambiar el color o añadir algún accesorio decorativo? Por ejemplo, puedes cambiar los pomos por otros más vistosos o personalizarlas con decoración en relieve.
Ahora bien, si tu salón es abierto, puedes pintar una pared de acento en el umbral de entrada o justo al frente de esta zona. De esta forma, generarás un punto focal que no pasará desapercibido.
Cambiar las fundas del sofá es una manera efectiva, económica y rápida de reformar tu salón con poco presupuesto. Si buscas mantener la luminosidad de tu salón, opta por una funda de tonos claros. Pero si buscas añadir un toque de elegancia y sofisticación, puedes inspirarte en estilos más industriales o modernos y elegir una funda de color gris oscuro o azul marino.
Pintar las paredes es una de las formas más económicas de reformar el salón, aunque también una de las más radicales. Experimenta con colores y elige pensando en dos aspectos centrales: estilo y luminosidad.
En primer lugar, pregúntate: ¿qué tipo de diseño busco? Si quieres un estilo más nórdico, opta por colores neutros, beige, blanco o tonos pasteles. En cambio, si quieres decorar con un ambiente vintage o moderno, puedes jugar con colores más vibrantes como verde menta o azul cielo.
En cuanto a la luminosidad, fíjate qué tanta luz natural recibe el salón. Si es un salón más bien oscuro, debes escoger una paleta de colores clara que refleje la poca luz recibida y así la amplíe.
Colocar espejos de manera estratégica puede hacer que tu salón se vea más grande y luminoso. Sitúa un espejo grande frente a una fuente de luz natural para maximizar su efecto. Esto ampliará inmediatamente toda la zona, haciendo que se sienta más despejada y equilibrada.
Reorganizar la disposición del salón puede tener un gran impacto en la apariencia y funcionalidad del espacio. Y ya no nos referimos solo a mover muebles, sino a cambiar la ordenación total de esta estancia.
Por ejemplo, puedes planificar un nuevo rinconcito de lectura o una zona de juegos para los niños. Si tienes mascotas, elige un punto del salón que será de ellos para que duerman cómodamente sin generar desorden. La idea es que adaptes el salón a las nuevas necesidades de sus habitantes.
Actualiza los accesorios y textiles como cortinas, cojines y mantas para reformar tu salón con poco presupuesto. Te recomendamos escoger telas ligeras para las cortinas, ya que esto ayudará a maximizar la entrada de luz natural.
Por otro lado, fíjate cómo puedes renovar los estampados y colores de tus cojines. Recuerda que estos son esenciales a la hora de decorar el salón. Al cambiar las fundas, modificarás el estilo general del lugar con nuevos patrones de diseño.
Decorar con plantas es una manera económica de añadir color y vida a tu salón. Sin embargo, si tu salón recibe poca luz natural, escoge especies que no necesiten demasiada iluminación. Distribúyelas en puntos estratégicos para mejorar la calidad del aire y el ambiente.
Por último, fíjate que las plantas no estorben la circulación del salón. Existen algunas variedades muy delicadas y al más mínimo roce pueden estropearse