Así que si quieres que tu hogar siga las tendencias decorativas de la temporada, apunta estas propuestas para convertir tus lisas paredes en superficie donde reine la textura.
Una opción es darle una capa de microcemento a tus paredes. De manera que incluso queden patentes los rastros de la allanadora. Olvídate de las paredes completamente lisas e impolutas. Lo que se busca son superficies que denoten vida, incluso que muestren algún desperfecto. Algo que encanta al estilo Wabi Sabi, uno de los estilos más en boga esta temporada.
Con las molduras puedes conseguir esa textura que se busca, pero de una forma muy elegante y señorial. Son perfectas para delimitar ciertos espacios e incluso para resaltar una obra de arte. Además, son un elemento muy asequible y fácil de instalar. Puedes pintarlas del mismo color que la pared, para que aporten esa textura que quieres, pero sin destacar. O pintarlas de otro color diferente al tono de la pared, para darles el protagonismo que se merecen.
Los listones de madera afianzan su presencia en los hogares. Son geniales para aportar calidez en aquellas estancias que así lo precisen. Pero también son grandes aliados a la hora de separar espacios de forma ligera o de delimitar diferentes zonas dentro de una misma estancia.
Con ellos además puedes crear composiciones increíbles, tanto en un dormitorio, añadiendoles a modo de cabezal, por ejemplo, como en un salón, destacando la zona del televisor.
Ya sea de madera natural o pintada, colocar madera a media altura a modo de arrimadero también es una forma de aportar carácter y personalidad a una pared. Con ello conseguirás calidez fácilmente si dejas el arrimadero de tono natural, o un ambiente muy romántico y chic si te decantas por pintarlo de blanco o de un color pastel.
Otra forma sencilla de dar textura a una pared es apostando por papel pintado. Cualquier modelo es válido. Sin embargo, si apuestas por un papel de efecto textil, el resultado será mucho más espectacular y efectivo. Es una forma muy elegante de vestir las paredes o destacar una de ellas para darle protagonismo. Una propuesta que nunca falla.
Dentro de la línea de los papeles pintados merece un apartado especial aquellos papeles con los que puedes crear un precioso mural en una de las paredes. De motivos florales o botánicos, siguiendo la tendencia de lo natural que está tan en boga, o apostando por un mural en blanco y negro con el que conseguirás dar un toque muy sofisticado a tu salón o a tu dormitorio.
El adiós a las paredes lisas no solo se refiere a estancias como los pasillos, los salones, los comedores o los dormitorios. Los baños también deben tener su poquito de carácter y personalidad. Por ello, más allá de las hornacinas, que son otra de las tendencias que apunta este 2025, las baldosas también vienen con textura.
Imagina un loft neoyorquino con paredes de ladrillo. No es algo retro, sino una tendencia que ha vuelto, aplicándose, eso sí, solo en una de las paredes para no saturar el espacio. Y quien dice ladrillos, dice una pared revestida de piedra. Con ambos puedes dar la textura que quieres a cualquier pared. No hace falta que sea para un estilo rústico, un espacio moderno también acepta ese tipo de revestimientos.