Durante el último tiempo hemos recibido algunas preguntas muy interesantes que hoy vamos a desglosar. Hemos preparado este consultorio deco para resolverlas y darte algún tip extra. Sigue leyendo para aprender un poquito más sobre decoración, estilismo y diseño de interiores.
Nos encanta esta pregunta porque los focos empotrados, plafones o apliques son excelentes soluciones decorativas. Aportan luminosidad y no ocupan espacio en el suelo. Son perfectos para espacios pequeños que necesitan luz cálida.
La ubicación de los focos empotrados debe seguir una regla clave: iluminar sin encandilar ni obstaculizar la vista. Asimismo, su función es destacar las áreas de uso como los muebles principales a los que alumbra. ¡No lo pierdas de vista!
Distancia para focos delante de un mueble o armario: Lo ideal es situar los focos empotrados a unos 50-70 cm del borde frontal del mueble. Esto crea un efecto de iluminación de acento sin proyectar sombras molestas.
Delante de la TV: En este caso, es esencial evitar reflejos en la pantalla. Coloca los focos empotrados a una distancia mínima de 1-1.5 metros de la TV. Por otra parte, deben estar preferiblemente distribuidos a los lados o en la parte trasera para crear una iluminación suave e indirecta.
Focos sobre la pared del sofá: Para que la luz no sea directa y molesta, se recomienda una distancia de 70-100 cm entre los focos y el respaldo del sofá. Asegúrate de que la luz sea cálida y tenue para crear un ambiente acogedor.
Sobre la mesa del comedor: Si los focos están empotrados, deben estar a una distancia de unos 60-80 cm del borde de la mesa para iluminar correctamente el área sin generar sombras incómodas. Combina esta iluminación con una lámpara colgada en el centro desde el techo, así darás protagonismo a la mesa principal.
Los salones decorados con muebles de madera y accesorios en color blanco, han sido tendencia en los últimos meses. Ambos son tonos neutros y cálidos, lo que te da libertad para añadir otros toques de color sin sentir que vas a saturar la estancia. Aquí te dejamos algunas ideas para añadir otras tonalidades en la estética del lugar.
En un salón comedor que tenga un sofá de color blanco, puedes jugar cómodamente con otros tonos elegantes. Prueba con tonalidades claras para un estilo sobrio: cojines en gris claro, mantas en verde oliva o un plaid beige. Ahora bien, si quieres dar un paso adelante, elige acentos en azul marino, gris topo, terracota o algunos más vibrantes como el turquesa y el mostaza.
En este caso, también puedes incorporar color en las sillas para conseguir un aire más moderno, fresco y divertido. La primera opción que tienes (y la más compleja) es cambiar la tela de las sillas, en caso de que sean tapizadas. Quita el tradicional blanco y pon un tono más vivo como el mostaza, el azul o el rosa palo.
Sabemos que no es una opción muy viable, pero existen otras soluciones para añadir color al comedor. Me refiero a los accesorios. Dale un toque distinto a la zona con jarrones de tonos tierra o en variantes de verde. Prueba también colocando flores o una lámpara que destaque en el techo. Además, puedes colgar un par de cuadros en la pared del comedor para darle toques artísticos a la zona.
Las composiciones de cuadros y fotos son fascinantes. Pero lo primero que debes entender es que no hay reglas estrictas ni inamovibles. Existen algunos principios básicos que te ayudarán a crear una distribución atractiva y equilibrada, pero no son excluyentes. La medida más importante que debes tener en cuenta es la distancia entre las fotos: debe ser de 5 a 10 cm entre cada una. La segunda medida más importante es que dejes volar tu creatividad y te atrevas con la decoración de las paredes. En el caso de las composiciones de fotografías, aquí tienes algunas que son habituales y quedan muy bonitas.
Esta disposición es ideal si deseas alinear fotos de diferentes tamaños en un pasillo o un espacio amplio. Intenta conservar una altura constante para crear armonía visual. Idealmente, el centro de cada foto debería estar a una altura de 145-152 cm desde el suelo.
Este tipo de composición es perfecta para espacios estrechos. Por ejemplo, una línea vertical de fotos ubicada entre dos columnas o entre dos puertas. Coloca las fotos de forma escalonada, comenzando con la más grande en la parte inferior y las más pequeñas hacia arriba.
Si tienes fotos de diversos tamaños, una composición tipo galería te permitirá destacarlas individualmente. Trata que los estilos de los marcos sean similares para dar una coherencia temática. Primero, ubica la pieza más grande o llamativa a una altura de 145-152 cm del suelo y, a partir de ella, expande la galería hacia los lados o arriba y abajo.
¡Llegamos a la última pregunta! El gotelé es un revestimiento de paredes particular, que puede dar algunos problemas. Uno de los mayores desafíos es poner otro tipo de revestimiento, en este caso, papel pintado.
En términos generales, sí es posible colocar papel pintado sobre paredes con gotelé fino. Sin embargo, lo recomendable es utilizar papel pintado adhesivo. Este tipo de papel está fabricado para adaptarse mejor a superficies rugosas como el gotelé. Es mejor para disimular los pequeños bultos sin que se abran las juntas. Ahora bien, no se recomienda usar papeles pintados tradicionales que requieren cola u otros pegamentos especiales. Están diseñados para superficies lisas y no se adhieren bien a las paredes con textura, lo que puede causar que se despeguen o rompan. Si lo que buscas es un acabado duradero y limpio, alisar las paredes antes de empapelar es la mejor opción.