Hoy vamos a explorar algunas técnicas para maximizar el espacio de tu salón y convertirlo en un punto de encuentro muy agradable.
La primera técnica es una estrategia clásica para maximizar espacios estrechos: los muebles multifuncionales. Estas soluciones de almacenamiento te permiten tener dos o tres muebles en uno solo. Por ejemplo, un sofá con almacenamiento debajo de los asientos o una mesa de centro con cajones. La clave está en elegir de forma inteligente los nuevos muebles de tu salón. Te ayudarán a evitar el desorden y favorecerán la organización del salón estrecho.
Es crucial mantener las zonas de paso despejadas para evitar la sensación de agobio que puede ser frecuente en este tipo de salones. Coloca los muebles grandes contra las paredes y deja el centro del salón libre para facilitar el movimiento. Esta estrategia mejora la funcionalidad y da la impresión de estar en un espacio más amplio.
Para un salón estrecho, un sofá lineal es la mejor opción. Evita los sofás voluminosos o con chaise longue que puedan obstruir el paso. Te recomendamos elegir uno de diseño ligero y con patas expuestas, esto ayudará a crear la sensación de amplitud que tu salón estrecho necesita.
A la hora de decorar un salón estrecho, elige una mesita de centro que no bloquee el flujo natural del espacio. Las mesas redondas son ideales para conseguir un tránsito visual suave. Ahora bien, si prefieres una mesa rectangular, no hay problema, pero intenta que sea pequeña y que vaya acorde con la paleta cromática y los materiales del salón.
Considera una mesa de vidrio, ya que su transparencia provocará un aire de ligereza y amplitud. Asimismo, las mesas de madera clara o de tonos neutros, ayudan a amplificar la percepción visual del espacio.
Aprovecha al máximo la luz natural y deja las ventanas libres de obstáculos. Igualmente, te recomendamos usar cortinas ligeras que permitan la entrada de los rayos de sol. Otra buena idea es pintar las paredes en tonos claros para reflejar la luz y crear una sensación de mayor amplitud.
Además, puedes decorar con espejos situados estratégicamente para multiplicar la luminosidad natural. En estos casos, lo mejor es ubicarlos frente a una entrada de luz como la ventana principal del salón.
Incorpora diferentes texturas y materiales para agregar profundidad y carácter a tu salón estrecho. Las alfombras, además de aportar calidez, son perfectas para zonificar el espacio. Las necesitarás en espacios pequeños o estrechos, ya que ayudan a mantener la buena organización y definen las distintas áreas como el comedor, la zona de estar o el rincón de juego para niños.
Elige materiales en consonancia con el estilo que deseas lograr. Si optas por un estilo industrial, incorpora elementos como vigas expuestas y ladrillos a la vista, que añaden un toque auténtico. En contraste, un estilo rústico se beneficia de la presencia de madera envejecida y el uso de texturas naturales como el ratán o la lana.
¡No nos olvidemos de las plantas! Siempre es un acierto decorativo contar con su verde presencia. Las plantas altas y esbeltas son ideales para salones estrechos, pues ocupan poco espacio en el suelo, pero añaden altura y dimensión.
Por otra parte, considera elegir una bonita lámpara de pie. Conseguirás una iluminación acogedora y su forma vertical ayudará a darle altura visual al salón. En este sentido, las columnas decorativas también pueden servir, además de que son originales y elegantes.
Finalmente, las estanterías altas son perfectas para aprovechar el espacio de las paredes. Podrás almacenar y exhibir libros, plantas, incluso pequeños cuadros y retratos.
