Ya sea que estés en pareja o simplemente quieras celebrar el día del amor con tus amistades, estas ideas decorativas te inspirarán.
La decoración para San Valentín no estaría completa sin el clásico rojo pasión. Por eso, una excelente idea son los globos redondos o con formas de corazón. Elige tonos rosa, rojos y blancos para añadir variedad al lugar.
Adicionalmente, aprovecha el aroma y la magia de las flores. Complementa la decoración de globos con un lindo bouquet de rosas tradicionales. Y si quieres encender la chispa de la pasión, puedes esparcir pétalos de distintos colores sobre la cama y prender velas aromáticas en la habitación.
Para muchas personas, cocinar es su lenguaje del amor. Por eso, es probable que si piensas en San Valentín venga a tu mente la idea de una cena íntima a la luz de las velas.
En este sentido, la mesa principal se transforma en la protagonista si hablamos de decoraciones románticas. Para adornarla, te dejamos algunos trucos y consejos que te ayudarán a organizar la velada.
En primer lugar, te recomendamos jugar con los colores y texturas que ya están presentes en tu casa antes de elegir los detalles decorativos. Por ejemplo, si te gusta la estética rústica o campestre, puedes apostar por floreros de colores beige o crema. Prefiere especies elegantes como rosas si la comida se trata de una cena. En cambio, si es un almuerzo de día, elige margaritas, claveles o tulipanes.
Acompaña con velas que se adecúen al tamaño de la mesa, es decir, ni muy grandes ni muy pequeñas. Ten en cuenta que los portavelas entregan mucho carácter a la decoración: deja volar tu imaginación a la hora de escoger formas y colores.
Otros detalles en los que puedes fijarte son los diseños para las servilletas, ya sean de papel o de tela. Si quieres darles un toque más elegante, apuesta por servilleteros o aros de servilleta en colores dorado, rojo o cobre.
Imagina la sonrisa de tu pareja al recibir un rico desayuno en la cama. Una bandeja con una pequeña mantita, tazas de café humeante y un bizcocho decorado en forma de corazón es el comienzo perfecto para el día. No olvides escribir una nota o carta. Es un detalle simple, pero profundamente personal y significativo.
Sin embargo, si prefieres algo más elaborado, puedes decorar la mesa para un desayuno perfecto. La luz íntima y tenue del fuego ayudan a mantener la atmósfera romántica de San Valentín, incluso si es temprano por la mañana.
Mezcla cristal y loza para que las llamas se reflejen en los distintos materiales. Este juego de luces dará un toque mágico a la decoración del desayuno.
Si en tu hogar tienes una bañera disponible, puedes convertirla en un espacio romántico durante este San Valentín. Nada mejor que un baño relajante para pasar un momento en pareja. Ideal para desconectar del estrés del día a día y disfrutar de la tranquilidad del agua.
San Valentín es también una oportunidad para compartir el amor en familia. Una actividad de decoración, como hacer guirnaldas de corazón o decorar galletas, pueden ser formas divertidas de incluirlos en la celebración.
La decoración para San Valentín es más que simples adornos; es una forma de expresar amor y crear recuerdos duraderos. Con estas ideas, podrás celebrar el romance y el cariño en tu hogar especialmente decorado para el gran día. Convierte tu casa en un espacio de conexión junto a tus seres queridos para pasar una jornada alegre y amorosa.