Todo espacio de nuestra casa requiere de mimo constante y especial. Como ya habrás experimentado, cada estancia, habitación y rincón requiere de diseños diferentes o cambios concretos. Para lograrlo, nada mejor que empezar por los textiles. Mantas, cortinas, fundas y alfombras hacen lo suyo. Pero hay un elemento decorativo que realmente cambia la percepción de los espacios y puede modificar totalmente un ambiente: los cojines. Son tan variados y fáciles de transportar que nos encantaría tener millones de ellos para adornar el salón o el dormitorio. Sin embargo, existen algunas pautas para conseguir un resultado armonioso. Hoy te contamos cómo acertar eligiendo los cojines adecuados para cada estancia según sus medidas, proporciones y colores.
El tamaño adecuado de un cojín tiene un gran impacto en el equilibrio visual de todo interiorismo. Pero no solo es una cuestión estética, la verdad es que un cojín con las medidas correctas entrega un plus de comodidad. A continuación, descubre cuáles son los tamaños y proporciones que debes tener en cuenta antes de escoger tus cojines.
En los sofás, el uso de cojines varía en función del número de plazas y del estilo del salón. Los tamaños estándar de cojines, como 45x45 cm y 50x50 cm, son ideales para sofás de dos o tres plazas. De esta manera, podrás mantener una proporción agradable y evitar que el mueble se perciba como un punto atiborrado de textiles.
Ahora bien, para sofás más grandes o modulares, puedes crear una combinación de diferentes tamaños para conseguir dinamismo y añadir capas de profundidad. Los cojines grandes (de 60x60 cm), colocados en las esquinas, aportan estructura. Por su parte, los medianos de 45x45 cm, así como los más pequeños de 30x30 cm, añaden un toque divertido y fresco.
También puedes probar con algunas piezas rectangulares de 30x50 cm y con diseños originales, tales como los cojines con formas esféricas o de nudos.
Siguiendo con la decoración del salón, es probable que entre las distintas piezas del mobiliario nos encontremos con butacas o sillones. Estos muebles también pueden decorarse con algunos cojines. Sin embargo, es importante escoger un tamaño adecuado, ya que son superficies más pequeñas y que dan menos juego que el sofá principal. En estos casos, los cojines no deben sobrepasar las dimensiones del asiento. Un cojín demasiado grande desentonará, quitará protagonismo al sillón y restará comodidad. La idea es que el cojín sea un elemento delicado y útil, no un obstáculo para sentarnos con libertad de movimiento. Para estos muebles, los cojines pequeños (30x30 cm o 40x40 cm) son la mejor opción.
Los cojines son un accesorio decorativo muy importante cuando queremos renovar el estilo del dormitorio. En estas habitaciones, la cama suele ser el punto focal más evidente. En este caso, el número y tamaño de los cojines dependerá del tipo de cama. Para una matrimonial o king size, te aconsejamos decorar con cojines grandes de 60x60 cm. Apóyalos contra el cabecero y complementa con dos cojines medianos de 45x45 cm. Para terminar, coloca dos cojines rectangulares o pequeños en la parte frontal.
Por otra parte, en camas individuales es recomendable reducir el número de cojines para no sobrecargar el espacio. Entonces, una buena idea sería adornar con uno o dos cojines de 50x50 cm acompañados por alguno más pequeño que le dé un toque distintivo a la cama.
En cuanto al color de los cojines, queremos recordarte una de las estrategias más efectivas en interiorismo: la conocida regla de tres. Esta técnica consiste en elegir tres colores en proporciones diferentes para equilibrar el espacio. Se aconseja usar un 60% de un color dominante, un 30% de un color secundario y un 10% de un color acento. Como resultado obtendremos un espacio armónico y estéticamente equilibrado. En el caso de los cojines puedes elegir algunas piezas neutras en tonos crudos o grises que funcionen como fondo. Luego, combina con colores más vibrantes o estampados geométricos de acento.
Si tienes un sofá de color neutro, puedes jugar con cojines de colores llamativos. Tonalidades como el azul cobalto, el verde musgo o el mostaza son perfectas. Por el contrario, si tu mobiliario tiene colores más intensos, como rojos o terracotas, opta por cojines en tonos suaves que no compitan con el color base. Nunca olvides que el concepto básico para decorar con cojines es el equilibrio.