Y te has preguntado en más de una ocasión, ¿la dejo vacía? o ¿qué puedes poner para que quede bien y no sea un impedimento de paso? Ahí van algunas ideas.
Las plantas siempre son bienvenidas al interior de un hogar, porque nos traen un pedacito de naturaleza al interior y aportan mucho color a espacios sosos o sobrios, como una escalera.
No es cuestión de que la llenes de plantas de manera que subir por ella sea como andar por la selva. Hablamos de colocar pequeñas macetas en algunos de sus escalones, puestos aleatoriamente. Tampoco en todos. Solo en algunos para aportar ese toque de color y vida que esa parte de tu hogar necesita.
Apostar por cuadros, fotografías o láminas es una de las opciones más socorridas y efectivas a la hora de decorar una escalera. Sus ventajas son muchas, ya que no ocupan espacio del suelo y puestos estratégicamente a lo largo de la escalera o en la parte de alguno de sus rellanos, pueden ser una buena opción de diseño.
Precisamente, la pared del rellano puede ser el lienzo perfecto para llenarla de cuadros de suelo a techo, y convertirla así en la protagonista que se lleve todas las miradas al subir por la escalera. Una gran obra de arte que ocupe gran parte de esa pared también es otra idea. Su posición a mitad de camino la hacen un espacio muy especial y resaltable.
Nos referimos a pequeñas baldas, preferentemente estrechas, para que no ocupen mucho espacio de paso. Estantes o baldas que puedes ir colocando a lo largo de la escalera para decorar y conseguir un plus de almacenaje donde guardar tus recuerdos.
Y si el rellano es lo suficientemente ancho, aprovéchalo para crear allí una auténtica biblioteca, con una gran estantería repleta de libros.
Otra idea. En las escaleras laterales, ¿qué te parece poner estantería pegada a la barandilla para esconder la escalera tras de ella?
Una de las ventajas de los espacios de las escaleras es que suelen ser pequeños, por lo que es fácil arriesgarse y ponerse creativos. Usa un color más llamativo en su pintura para destacar o atrévete con un papel pintado un tanto extravagante para convertirla en una zona protagonista, en lugar de en un espacio anodino.
Y si hablamos de decorar lo que es propiamente la escalera, una de las tendencias actuales apuesta por aprovechar la contrahuella de los escalones para introducir allí un elemento decorativo. Ya sean unas baldosas decorativas, un papel pintado, forrarlas de madera o pintarlas de color. Solo con ese pequeño detalle, le darás un aire diferente a tu escalera.
Las escaleras suelen ser también lugares oscuros a los que la luz natural no siempre llega. Aunque no lo creas, solo con la iluminación puedes conseguir diseños sorprendentes.
Si hablamos de una gran escalera puedes optar por una preciosa lámpara que se deslice a lo largo de todo el hueco de la escalera a modo de escultura vertical. Si buscas una opción más moderna, apuesta por iluminar la parte cercana a los peldaños con focos individuales para cada tramo. Las luces y sombras que cree la luz, también serán decorativas.
Las paredes son la gran baza de las escaleras, por aquello de evitar objetos en el suelo que entorpezcan su paso. Así que, darle textura a sus paredes, es una forma fácil y sencilla de decorarlas. Puedes usar un papel pintado con textura, añadir algunas molduras, poner un arrimadero en su subida e incluso panelar con listones de madera para decorar alguna de las paredes.