Más allá de las consideraciones del feng-shui en las que para conseguir un equilibrio en tu hogar debes evitar colocar espejos en según qué lugares, como frente a una cama o frente a las llamas de un hogar, hay otras consideraciones más lógicas que también debes evitar, tengas en cuenta o no esa filosofía ancestral.
Básicamente, son eso reflejos que uno quiere esconder, que no quiere que sean vistos, y que una mala posición de un espejo puede delatar.
Es uno de los reflejos que debes evitar. A nadie le gusta estar en un comedor o en un salón y ver que, en el precioso espejo de pie que tienes situado allí, lo que ves es el baño. Es antiestético y puede resultar incluso ofensivo. A nadie le gusta estar comiendo con la imagen de un retrete ante él.
Así que tan importante es saber colocar el espejo para que luzca en todo su esplendor, como tener en cuenta, no solo su presencia, sino su reflejo. Apunta hacía otro lugar. Quizás solo basta con colocarlo unos centímetros al lado.
Sabemos que son niños y que cuando en están en plena vorágine de juegos es difícil que mantengan el orden, pero si en el espejo de tu pasillo o de tu recibidor el reflejo que aparece es su cuarto de juegos repleto de cosas aquí y allí, tiradas por el suelo, tus visitas pueden pensar que toda tu casa es un desorden y un caos.
Si quieres tenerlo en ese recibidor, basta con cambiarlo de pared o simplemente variar su altura.
Sabemos que es imprescindible tener un espejo en el vestidor. Pero también sabemos que esos momentos de no saber qué me pongo y empezar a probarte modelitos, zapatos y complementos, puede ser un caos total.
Intenta que el espejo de tu vestidor refleje algún elemento bonito, como una ventana, un cuadro o esa planta que te aporta color. Ni se te ocurra colocar el espejo de manera que lo primero que se vea sea el armario desordenado o esa otomana tan chic en la que dejas toda la ropa desechada de las pruebas de tus looks.
Nos consta que en la zona de la cocina es difícil que haya un espejo, sin embargo, quizás ese espejo del pasillo puede delatar tu zona de lavadora. Otro espacio, generalmente bastante desordenado y caótico que no quieres que se vea. ¿O crees que alguien quiere cotillear tu ropa sucia?.
Simplemente desplaza de lugar ese espejo o cambia su altura. Aunque esté en el mismo lugar, ese pequeño cambio de posición puede hacer que refleje una cosa mucho más atractiva, como tu colección de plantas aromáticas, situadas en la misma cocina.
¿Y qué me dices de tu despacho? Quizás antes era ese lugar ordenado e impoluto que casi nunca se usaba y que estaba siempre perfecto, pero el teletrabajo lo ha convertido en una leonera. Tienes papeles por doquier y el desastre se ha convertido en un habitual.
Así que, si antes el espejo reflejaba tu bonita mesa de escritorio, ahora debes cambiar su ubicación y evitar un reflejo que para lo único que sirve es para recordarte que eres un desordenado o que tienes trabajo acumulado por resolver.
Es otra imagen que siempre queremos evitar. El desorden de una cocina tras una cena con amigos o una comilona en familia es inevitable. Si ese caos se ve desde el comedor, porque el espejo que has colocado en la pared de enfrente así lo refleja, mostrará todo lo que te has esforzado y trabajado para tus invitados, pero sinceramente a nadie le gusta ver los platos por fregar.