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Un sofá oscuro puede ayudar a dar calidez a un espacio con predominio de tonos claros. No tiene por qué ser un problema. La mejor opción es apostar por una base neutra de tonos claros, con paredes en blanco o beige y muebles de madera clara, como es tu caso. Para matizar un poco la oscuridad del sofá puedes añadir cojines que aporten un poco de color, al tiempo que ayude a unificar los tonos de los muebles con los del sofá. Puedes añadir también una alfombra de tonos claros, para aportar más luminosidad al espacio.
Otra opción más arriesgada es pintar la pared en la que se encuentra el sofá de su mismo color, de manera que queden unificados y el sofá casi desaparezca.
Una tercera opción sería apostar por una funda del color que desees que sea tu sofá. En el mercado hay infinidad de opciones. Algunas tan increíbles que parecen auténticas tapicerías.
Y por último, si no te ves capaz de conseguir una decoración que te agrade, echa un vistazo a las opciones que te ofrece Livitum. Por poco dinero, nuestros diseñadores pueden crear la habitación perfecta para incluir tu sofá en el diseño.
En un espacio tan grande tienes muchas opciones. Lo más sencillo es poner una gran planta. Siempre son bienvenidos y decoran cualquier rincón sin esfuerzo.
Pero también puedes optar por algo más elaborado, como un pequeño escritorio o un rincón de lectura. Una cómoda butaca, situada junto a tu bonito sofá de piel, acompañada de una buena lámpara de pie para iluminar tus libros puede quedar muy coqueto. Añade una pequeña mesa auxiliar, donde dejar tu lectura o tu café, y tendrás el espacio más relajante de tu salón. Dado que el sofá es blanco puedes dar color con una butaca de un tono llamativo, o incluso con un estampado atrevido.
Otra idea es poner una bonita estantería en ese hueco de 120 cm. Allí puedes guardar todos tus libros, acompañados de algún elemento decorativo. O apostar por una alacena vintage donde guardar tus objetos decorativos más preciados. Otra idea simple es una consola sencilla, de esas que no tienen cajones ni puertas, y colocar bajo ella alguna cesta de mimbre para guardar las mantas y cojines del sofá.
No hay ninguna tela milagrosa que evite las manchas, los pelos y los arañazos de las mascotas. Sin embargo, sí que hay algunos tejidos que soportan mejor sus envites.
Esas telas más idóneas son las de microfibras, creadas con poliamidas, poliésteres y otras fibras sintéticas. Son telas más robustas que están tejidas de forma más densa, por lo que son más resistentes a posibles roces y arañazos. No se deshilachan fácilmente y es fácil sacar de ellas los pelos de tu perro con un simple cepillo. Además, son suaves al tacto y no es difícil encontrarlas en tapicerías de diferentes colores y estampados.
Otra opción son los llamados tejidos de Aquaclean. Son unos tejidos que tienen una capa protectora, desarrollada con una innovadora tecnología, que se comporta como una barrera elástica y flexible que impide que, por ejemplo, las uñas de tu perro deshilachen el tejido. Además, son de fácil limpieza, ya que cualquier mancha es fácil limpiarla solo con agua y una esponja
Eso sí, has de tener en cuenta que ninguna tela es indestructible. Éstas son más duraderas y aguantan mejor la presencia de mascotas, sin embargo, siempre dependerá del uso que le des y del comportamiento de tu mascota sobre ella.