No te preocupes. Te vamos a dar algunas ideas para convertir tu anodino comedor en un espacio que invite a las reuniones familiares, a esas sobremesas eternas y a esas largas conversaciones.
Al fin y al cabo es uno de los elementos principales del comedor. Debe ser una mesa lo suficientemente grande para que quepan todos los comensales de forma aireada y no queden muy apretujados.
Dependiendo del espacio del que dispongas, es buena opción optar por una mesa circular que, ocupando menos metros cuadrados, permite sentar a más personas. O quizás una mesa que se alargue cuando tengas invitados y la puedas recoger cuando no sea usada.
Es otro de los elementos importantes, ya que deben ser ante todo cómodas. Una buena comida debe estar acompañada de comodidad para ser espléndida. Así que procura que las sillas de tu comedor sean lo suficientemente cómodas para que tus invitados no quieran levantarse.
Las sillas con reposabrazos son geniales para conseguir esa comodidad. Pero, cuidado. Si cuentas con poco espacio es mejor prescindir de ellos, ya que ocupan un espacio que posiblemente no tengas.
Para sentirse cómodo en el comedor es importante que su decoración transmita relax y confort. Una de las mejores formas de conseguirlo es a través de los colores usados en su decoración. Los tonos neutros siempre son bienvenidos. Así como los azules o los verdes, más o menos intensos.
Pero si quieres ser más atrevido, puedes hacer de una de las paredes del comedor el centro de todas las miradas, decorándola con un papel pintado extremado o una pintura diferente. En ocasiones esta opción es genial para separar espacios, cuando el comedor comparte la misma estancia que el salón.
Más allá de la mesa y las sillas, en el comedor también es bueno tener un mueble que te sirva de almacenaje para los enseres que usarás allí. Un lugar donde guardar las vajillas, la cristalería o los manteles. De esta forma, lo tendrás todo a mano.
Eso sí, procura que los muebles no se coman el espacio del comedor. Has de tener suficiente espacio para que los comensales puedan sentarse y levantarse sin impedimentos. La mejor opción es optar por muebles de líneas simples y sencillas que, te aportarán este plus de almacenaje, pero sin dejar de dar fluidez al espacio.
Presta un poquito de atención también a la decoración del comedor. Es un espacio en el que hay pocos muebles, así que la decoración de las paredes es muy importante.
Una propuesta que nunca falla en el comedor es un buen espejo, ya que suelen ser espacios pequeños que necesitan más amplitud visual. Además, decoran sin mucho esfuerzo. Eso sí, has de tener en cuenta la altura al que lo pongas. A nadie le gusta verse reflejado mientras está comiendo.
Otra buena opción, simple y sencilla, es incorporar algunas molduras en las paredes. Dan un toque muy elegante a la habitación y no ocupan mucho espacio.
En ocasiones no se presta la suficiente atención a la iluminación del comedor, cuando es algo fundamental. Debe ser lo suficientemente intensa como para ver con claridad lo que uno está comiendo, pero también un poco tenue para crear un ambiente agradable.
Una de las mejores opciones es la de situar una lámpara sobre la mesa, aunque se tenga otra luz general en esa estancia con focos u ojos de buey. Esa lámpara ayudará a focalizar la luz sobre la mesa de forma atenuada. Eso sí, la distancia adecuada que debe haber desde la mesa hasta el extremo inferior de la lámpara es de 75 a 90 cm, en función del tamaño de la lámpara.
Y sobre todo, para hacer del comedor el lugar perfecto para una reunión familiar no olvides decorar la mesa. No vale poner solo los platos, los vasos y los cubiertos. Un bonito centro de mesa con flores, unas velas, una vajilla bonita con bajo platos o un mantel y unas servilletas elegantes, marcarán la diferencia.
