Es un neutro. ¡Lo es! Y ya sabes lo que eso significa: combina con todos los colores de la paleta cromática y, por tanto, puedes utilizarlo como base para empezar a decorar.
¡Es moderno! Ha sabido hacerse un hueco en el pódium de los neutros y convertirse en un TOP, sobre todo por la ventaja que ofrece el encontrarse a medio camino entre los grises -que suelen escogerse para ambientes más modernos- y el beis -para los más clásicos-, colocándose en un lugar intermedio apto para los ambientes más actuales de cualquier estilo.
Es atemporal. Ser un neutro es sinónimo de no pasar de moda, por lo que, si tus gustos cambian y quieres rediseñar la casa, te resultará muy muy fácil reciclar una pieza en greige (un mueble lacado, una butaca tapizada, objetos deco…)
Un color con infinidad de matices. La gama de greiges es tan amplia que seguro encontrarás el tono perfecto para conseguir el ambiente que buscas para tu casa.Puedes usar un tono más oscuro si tienes mucha luz en casa y quieres crear un ambiente con una fuerte personalidad, o recurrir a un más clarito si lo que buscas es crear una atmósfera más relajada.
Lo decíamos justo aquí arriba: el greige es un color tan versátil que vas a poder introducirlo en casa sea el que sea tu estilo deco y combinarlo con cualquier color. Aún así, te recomendamos que pruebes con alguna de estas combinaciones:
greige + blanco, para conseguir un espacio muy muy luminoso;
greige + azules, para un ambiente elegante y con un punto de sofisticación;
greige + rosas empolvados y lavandas, para crear una atmósfera romántica;
greige + verdes, para ambientes jóvenes y frescos;
greige + ¡estampados!, para una estancia de plena tendencia. Recuerda que este año las flores son las reinas de los estampados. Las verás en múltiples tamaños y, muy especialmente, en tonos vivos sobre un fondo neutro… ¡como el greige!
La madera y las fibras naturales son los aliados perfectos del greige para crear un ambiente en el que lo natural sea el protagonista. Jugando con las tonalidades, los diferentes acabados de las maderas y las diferentes maneras de trabajar las fibras naturales se consiguen ambientes de estilos muy distintos pero que tienen el elemento natural en común.
Puedes combinarlo con maderas no tratadas para conseguir un ambiente de estilo rústico, pulidas para un ambiente más moderno o potenciar el uso de las fibras en el mobiliario para un look boho. Las opciones son múltiples y ¡el acierto está más que asegurado!
