La propia ciudad de París es una de las protagonistas de la serie. Pero, más allá de sus extraordinarias vistas, la comedia se centra principalmente en el piso de Emily y en su lugar de trabajo. Su casa es un tanto ecléctica, con un aire bohemio propio del barrio en el que se sitúa, el barrio latino de la capital francesa. Mientras que su oficina es algo más chic, más glamurosa y porqué no decirlo, más francesa.
Emily es de Chicago, pero la decoración de su casa y la de su oficina está muy alejada de la estética americana. Es puro estilo francés.
En una serie donde la moda ha cobrado un protagonismo inesperado, es normal que los modelitos se luzcan, incluso cuando no se llevan puestos. Por eso, en el apartamento de Emily no falta un armario abierto en el que colgar sus outfits, bolsos y complementos. Puedes optar por hacer lo mismo, con un gran colgador, un burro o un armario sin puertas, y colgar allí tu vestuario. Le dará un aire muy bohemio a tu estancia.
Dormitorio de Emily Cooper con armario abierto. A pesar de que a veces Emily lleva looks un tanto extravagantes, su apartamento no lo es para nada. Resulta algo sobrio, aunque con un toque descarado. Puedes conseguirlo pintando las paredes de tonos neutros, y aplicando color en los cojines, la ropa de cama o en las pantallas de las lámparas de sobremesa, imprescindibles en esta serie.
El terciopelo y el color que aportan los cojines, el puf y la alfombra dan un toque sofisticado y muy "Emily" en cualquier estancia. Es un piso en un edificio antiguo, por lo que lo viejo se funde con lo nuevo. Algo que puedes emular, combinando piezas de diseño con muebles vintage, algún objeto de decoración antiguo, junto a un cuadro de autor.
Emily con su compañera de piso en su apartamento de concepto abierto. El minimalismo no va con Emily, así que si quieres que tu habitación se parezca a la suya, llénala de cojines y de muebles de estilos diferentes. Pero hazlo con coherencia. Su desorden es equilibrado, sin grandes estridencias y apostando por objetos y colores que rozan el romanticismo. En un estilo bohemio como el suyo, es bueno que añadas tejidos y materiales naturales, para conseguir sensación de confort y funcionalidad, acompañada de cierta modernidad.
Edificio donde está ubicado el piso de Emily en París (Francia). Por su contra, las oficinas de Savoir son pura elegancia. Ese lujo chic francés que enamora a cualquiera. Así que, si quieres esa elegancia intrínseca francesa en tu hogar, apuesta por molduras en los techos y en las paredes, por suelos de baldosas blancas y negras, por muebles de diseño, de formas redondeadas y curvas y por colores de sofás y sillas sorprendentes, como un rosa chicle o un verde botella. Y no te olvides de incorporar tonos dorados y metálicos en la decoración. Unas sillas con las patas doradas o una lámpara de sobremesa con el pie del mismo material y una pantalla negra, puede ser un must.
La oficina donde trabaja Emily destaca por su estilo lujoso francés. Savoir es un espacio que debe transmitir lujo, ya que es una agencia especializada en esas marcas. Un lujo francés muy bien representado por un estilo moderno, con toques art-decó.
Si en tu salón o comedor cuentas con una chimenea, ya tienes mucho ganado. Son imprescindibles para encontrar ese look sofisticado que buscas. Si no, puedes resaltar una pared con una bonita obra de arte iluminada o un gran espejo con un maravilloso marco metálico.
Esta oficina tiene una inspiración nórdica y es ¡très chic!. Se trata de una oficina muy del estilo de la famosa serie. Pinta las paredes de tonos claros y neutros. Y consigue el glamur con pinceladas de negro y dorado en mobiliario y accesorios.
Quizás tu hogar no resultará una copia calcada del de Emily, pero se acercará bastante. Lo que sí que conseguirás es ese look tan francés y chic que enamora.
