Ya tengas un suelo de madera, de cerámica, de cemento o de baldosas hidráulicas, tenemos ideas para que la decoración de tu salón no sea un problema. Lo ideal es contar con suelos de tonos neutros, ya que eso facilita el tener un lienzo en blanco sobre el que trabajar. Pero si en lugar de eso tienes suelos de madera oscura, un maravillosos suelo hidráulico que quieres conservar o unas baldosas de cerámica de un color que no te acaba de encajar, te damos algunas ideas.
Es un tipo de suelo que indudablemente aporta mucha calidez a tu salón. Ya sea de un tono de madera claro o un tono más oscuro, lo ideal es optar por unos muebles que tengan dos tonos más o bien sea de un color mucho más claro para conseguir, sea el caso que sea, que haya contraste entre el suelo y el mobiliario.
Actualmente, los suelos de madera clara son más tendencia y quedan genial, tanto con muebles blancos o con muebles también de tono claro, aunque no del mismo color. Con ello conseguirás mucha más luminosidad en tu salón y, por tanto, mayor sensación de espacio. Sin renunciar, por supuesto, a esa calidez natural que te ofrece un material tan ligado con la naturaleza.
Hace un par de décadas, sin embargo, los suelos de madera oscura eran un must. Se consideraban muy elegantes y señoriales. Pero, las modas cambian y eso, ahora se ve un poco anticuado. Para matizarlo, lo mejor es pintar las paredes de blanco, al igual que los rodapiés, elegir muebles blancos o de madera muy clara y, si se puede aclarar también el color de la carpintería. De esta forma, el color oscuro del suelo quedará suavizado, creando un contraste que irá genial en tu decoración.
Básicamente la idea es la misma que en los suelos de madera. Con suelos de tonos claros puedes añadirle muebles de madera clara o más oscura, según sea el estilo que quieras en tu salón. También quedan bien los muebles blancos. Luego es cuestión de ir añadiendo color a través de los textiles. De manera que cuando te canses de ellos, puedas sustituirlos más fácilmente.
En el caso de tener un suelo de un color difícil, piensa en añadir alfombras que cubren gran parte del espacio del salón. Es una zona en la que las alfombras son bienvenidas y no resultará extraño. Además, si optas por una de gran tamaño, resultará muy cálida y dará un toque muy acogedor a tu salón.
Son una maravilla y sus alegres colores dan un chute de alegría a cualquier estancia. Sin embargo, has de tener cuidado en la decoración si cuentas con este tipo de suelo. Son tan llamativos que es mejor que la decoración sea simple y sencilla, de colores neutros para darle el protagonismo que se merece a estos bonitos suelos.
Apuesta por pintura de tonos neutros, por muebles de tonos claros e incorpora algún color a la decoración de alguno de los tonos destacados de las baldosas. De esta forma unificarás y dar coherencia al diseño. Por ejemplo, si la baldosa hidráulica destaca por un tono azulado, atrévete a poner un sofá de ese color, o si predomina el amarillo, añade cojines de ese mismo color.
Son tan asépticos que tendrás que apostar fuerte por la decoración, a no ser que quieras un estilo industrial. Entonces, ese tipo de suelo, le van que ni pintado. Para el resto de diseños, deberás esforzarte para conseguir un plus de calidez, ya que este tipo de suelos resulta excesivamente frío.
Añade alfombras, muebles de madera con toques de metal o muebles blancos que contrastan con el gris de cemento. Añade color a través de los textiles y los cuadros, para dejar de lado la sobriedad de este tipo de suelos y crear un salón acogedor.
