En este diseño de María Solbes la calidez se consigue gracias al color terroso de las paredes y a la combinación de otros elementos que lo hacen un espacio muy acogedor. Empezando por la pared frente al sofá repleta de listones de madera y acabando con un cómodo sofá de tres plazas con chaise longue, revestido de un suave borrego, que invita a relajarte.
El punto focal de este salón moderno se lo lleva una preciosa lámpara de arco en negro, que ilumina la zona cálidamente, y unos llamativos cojines, de diferentes estampados y tonos tierra, que aportan vitalidad y personalidad a la estancia.
Para complementar el diseño se ha añadido una mesa de centro circular de madera maciza de mindi y una mesa auxiliar de madera de mungur, junto a un puff cuadrado, que aporta más asientos al conjunto. Situado todo eso sobre una bonita alfombra, tan necesaria para aportar calidez en los meses de frío.
En la pared de listones, decorada con un espectacular lienzo de colores atrevidos, se ha situado una consola lacada en blanco con chapa de roble, junto a un espejo de ventana de cuerpo entero, que ayuda a reflejar la luz que entra por la ventana. Tan útil en estos días tristes de otoño.
No creas que para crear ambientes acogedores es necesario usar siempre tonos cálidos. Para muestra este salón en el que el blanco y el negro son los protagonistas, creando un ambiente sofisticado y atemporal del que no querrás salir.
El protagonista indiscutible del espacio es un cómodo sofá de cuatro plazas con chaise longue en blanco, que contrasta con un conjunto de mesas de centro en negro, de madera y hierro, con mucho estilo.
Frente al sofá se ha colocado un mueble de TV bajo y una vitrina más alta, también en negro, que ayudan a integrar el diseño y ofrecen funcionalidad a la estancia.
La alfombra que no falte. Y unos cojines sobre el sofá, tampoco. En este caso, de un tono vibrante para aporta un toque de color y un negro que ayuda a cohesionar esta decoración tan moderna en blanco y negro.
Uno de los estilos más cálidos y acogedores del mundo del interiorismo es el nórdico. Esa combinación de tonos neutros con madera lo hace especialmente agradable. Es un estilo surgido de los países escandinavos, en los que las bajas temperaturas del invierno les hacen pasar mucho tiempo en casa. Así que es el salón ideal para el invierno que se acerca.
En esta ocasión, los tonos claros y neutros son los protagonistas. Con un bonito sofá de cuatro plazas con chaise longue en un blanco impoluto, que está acompañado por un par de butacas muy originales, que invitan a sentarte en ellas, sí o sí.
La madera está presente en un mueble bajo en la pared frente al sofá y en la mesa de centro, en una mesa auxiliar y en una balda situada detrás del sofá donde poder poner algunos objetos decorativos y un precioso cuadro.
Completan este diseño de Livitum una alfombra de lana en tono más oscuro y un bonito puff redondo de yute.
¿Y qué me dices de este otro salón? Es simple y elegante a partes iguales, con un toque de calidez que lo hace extremadamente acogedor. Aquí predominan los tonos claros combinados con la madera. El tándem perfecto para crear ambientes que invitan a pasar las tardes de domingo sin salir de casa.
Como siempre es imprescindible un buen sofá para crear salones cómodos. En este caso un sofá de tres piezas con chaise longue en tono beige, que va acompañada de una bonita butaca con patas de madera, del mismo tono. Pero sin duda, aquí lo que destaca es un mueble de estilo colonial que enamora a cualquiera al primer vistazo. Se trata de un aparador de cuatro puertas de madera maciza, ideal para guardar todos los enseres de la habitación.
La madera también vuelve a aparecer en el mueble bajo de la TV y en una mesa de centro redonda, situada sobre una alfombra de lana.