"Un espacio ordenado, equilibrado y visualmente más amplio". Esto es lo que, según el interiorista Yannick Serra, se consigue aplicando la simetría al diseño de interiores. Lo cierto es que, en las estancias en las que se recurre a ella, se consigue crear una atmósfera de calma y serenidad que las hace muy acogedoras.
¿Cómo se consigue? Hay varias formas de trabajar con ella. La más sencilla es que busques un punto de la estancia que puedas convertir en un eje a partir del cual ordenar el espacio creando a lado y lado composiciones idénticas. Pero, ¡ojo! No se trata únicamente de colocarlo todo a pares -aunque, como verás, trabajar con piezas gemelas es un recurso sencillo y muy útil- sino de que construyas patrones deco que te ayuden a conseguir sensación de orden.
Puedes hacerlo siguiendo alguna de estas ideas:
Aprovechar los elementos estructurales de la estancia. Una viga, un recoveco en la pared, un ventanal o una chimenea: cualquiera de ellos puede convertirse en eje de simetría. Escoge un elemento que tenga espacio suficiente a lado y lado para luego crear una composición idéntica a derecha e izquierda.
Colocar muebles gemelos. ¿Tienes un salón súper amplio y necesitas muchos asientos? Coloca dos sofás idénticos enfrentados. ¿Necesitas una alacena? En vez de hacerte con una de grandes dimensiones, opta por dos más pequeñas que sean idénticas. Lo decíamos más arriba, colocar muebles gemelos es un recurso deco que te ayuda a generar sensación de orden sin restar ni un poquito de funcionalidad.
Multiplicar las luminarias. Puedes, por ejemplo, colocar dos lámparas suspendidas iguales sobre una mesa de comedor rectangular. No solo conseguirás la impresión de balance visual, sino también una iluminación más homogénea que si colgases un único punto de luz central. Puedes repetir esta idea sobre las mesitas de noche e incluso en la zona de tocador del baño.
Jugar con los textiles: Coloca una cortina doble (una en un tono más claro y la otra más oscuro) o utiliza el mismo estor para dos ventanas que estén una al lado de la otra. En los suelos, juega con las alfombras: por ejemplo, opta por dos piezas de la misma colección, forma y color para delimitar la zona del sofá y la del comedor.
Duplicar los accesorios deco: dos cuadros o dos espejos de las mismas dimensiones y con el mismo marco sobre el sofá, tres mini-cactus colocados respetando la distancia entre ellos sobre el alféizar… Multiplica un mismo elemento deco (velas, macetas, figuras…) y colócalos de forma estudiada a lado y lado de un eje de simetría imaginario.
Uno de los objetivos que siempre está presente en un proyecto de interiorismo es que el diseño final de cada estancia y de ellas entre sí, sea coherente. Existen varios recursos para conseguirlo, pero uno de los más efectivos es buscar un elemento que haga de nexo de unión: puede ser un color -usar tu preferido, por ejemplo, en la tapicería del sofá, en algún detalle de las cortinas y en la ropa de mesa, por ejemplo-, un mismo tono de madera para el mobiliario o algún elemento decorativo. Este nexo de unión se convierte en el hilo conductor que explica la decoración de toda la vivienda.
Yannick Serra nos propone utilizar las plantas. En su casa, nos cuenta, coloca dos o tres puntos verdes en las estancias más amplias -como el salón o el comedor- ubicándolas en puntos estratégicos como la mesa de centro, una mesita auxiliar o algún rincón libre. Nos recuerda que jugando con ellas, no solo conseguimos crear esa coherencia deco buscada, sino que nos beneficiamos de todo lo que nos aporta tener plantas en casa -purifican el aire, regulan la humedad e incluso son capaces de absorber el ruido y la electricidad estática- y cuidar de ellas (¿conoces la plantaterapia, ¿verdad?).
¡Por cierto! Las plantas también se utilizan para conectar el interior y el exterior de tu vivienda. Si es posible, coloca algunas de tus plantas de exterior en un lugar que sea visible desde el interior para conseguir ese efecto.