Qué es el color acento y todas las claves para utilizarlo

El color acento es aquel que se utiliza para dar algo de contraste a los tonos mayoritarios de un espacio. Es, por decirlo más coloquialmente, como la guinda del pastel. Ese color que destaca, a pesar de no ser el más abundante en la habitación. Ese color que es algo opuesto al resto, por ser más llamativo, por ser más oscuro, o por todo lo contrario.
Publicado por Marta Parareda · 18 de mayo de 2023
Qué es el color acento y todas las claves para utilizarlo

Lo puedes aplicar de muchas formas, pero su característica principal es que destaca por encima del resto de colores escogidos en ese espacio. Suelen ser colores algo llamativos, aunque no siempre. Dependerá de los otros tonos elegidos para el lugar.

Regla del 60-30-10

Si aplicamos la llamada regla del 60-30-10 que suele usarse para saber el modo en que se distribuyen los tonos en un espacio, el color acento correspondería a la cifra 10. Es decir, esta regla, muy usada en decoración, consiste en aplicar un color principal a la habitación en un 60% del espacio. Suelen ser las paredes y techos. Después un color secundario, que ocuparía el 30% del espacio, utilizado en muebles y elementos decorativos. Y un tercer color, que suele dar contraste a los otros dos o resaltar por encima de ellos, sería el color acento. Ese que ocuparía solo el 10% del espacio y que aplicaríamos en pequeños detalles. Tipo un cojín sobre el sofá, una butaca determinada, la ropa de cama o el color predominante de los peluches del cuarto de tu hijo.

No tienes porqué poner un solo color acento. A veces, puedes utilizar más de un color acento, si el resto de la estancia está invadido de colores neutros y necesitas algo que le dé vivacidad. Por ejemplo, en un dormitorio de estilo minimalista en el que predomina el blanco en paredes y ropa de cama, es buena incorporar algo de color, aunque de tonos saturados, por ejemplo con varios cojines de varios colores, que destaquen sobre tanto blanco y cobren protagonismo.

Colores llamativos o suaves. Depende de los otros tonos

Tampoco tiene que ser un color estridente. Si la habitación está decorada en colores fuertes, quizás es bueno que el color acento sea suave para atenuar tanta estridencia. Su principal particularidad es llamar la atención sobre el resto de colores de la estancia, aunque solo aparezca en objetos puntuales. De ahí radica su magia y su encanto.

Además es un cohesionador. Al elegir un color acento debes de tener en cuenta que ha de resaltar, pero también debe ayudar a que el conjunto de la decoración esté conjuntada, creando el círculo perfecto entre todos los tonos elegidos en el diseño.

Acento en objetos pequeños, paredes o muebles

Puedes incorporarlo de mil formas posibles. En objetos pequeños o en muebles que quieren cobrar protagonismo. Incluso puedes apostar por crear una pared acento con ese color. Será esa pared que se llevará el protagonismo absoluto de toda la habitación, al estar pintada de un color diferente al resto. Llamando la atención al primer vistazo. Algo que siempre pretende el color acento.

Si hablamos de objetos pequeños, es bueno incorporarlo en más de un lugar. O sea, si eliges un amarillo vibrante en un jarrón, procura que también aparezca en un cojín, en una vela aromática o en el color predominante de un cuadro de la pared.

Si lo quieres incorporar a través de los muebles, también puedes. En una habitación en la predominan los tonos neutros y algún rosado claro, por ejemplo, puedes añadir una butaca de color fucsia. Cohesionarás los tonos y destacarás ese asiento, como el protagonista del espacio.

Si aplicas la regla del 60-30-10 correctamente no te resultará difícil acertar con el color acento. Además, al tratarse de un tono que solo ocupa un pequeño espacio de la habitación, siempre es más sencillo reemplazarlo si el resultado no es el deseado. Sobre todo, si lo incorporas con esos pequeños objetos fácilmente reemplazables, como un cojín, una manta o un jarrón. Atrévete a probar y deja volar tu creatividad. La prueba–error es la mejor para acertar y conseguir ese color que contraste con el resto, y a la vez, cohesione tu diseño.

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