Al igual que pintas otras estancias de tu casa de tonos claros para aportarles más luminosidad y sensación de amplitud, el caso del baño es igual. Procura usar revestimientos de tonos claros que ayudarán a reflejar la luz, consiguiendo que visualmente parezca mucho más grande de lo que es. Además, los colores más claros dan mayor sensación de pulcritud.
Del mismo modo, usa sanitarios blancos, que ayudarán a aumentar esa sensación y añade color a través de los textiles de baño o añadiendo un toque de madera con los accesorios o el mueble del baño. Por ejemplo, usando una escalera de madera para usar como toallero, con perchas donde colgar las toallas o con cestas de fibras naturales donde depositar la ropa sucia o esconder el papel higiénico de reserva.
Otra forma de conseguir que tu baño visualmente parezca más grande es utilizando elementos suspendidos. Ya sea el propio inodoro, como el lavamanos. La ausencia de un pie hace que se vean menos elementos en el suelo, aportando una mayor amplitud.
Una idea con la que se consigue mucha ligereza en el espacio es con una encimera suspendida a modo de estante sobre la que colocar un lavamanos exento. Su simplicidad hace que se consiga una mayor amplitud. Sin embargo, esta opción te impide tener algo más de almacenaje, siempre tan necesario. Así que es buena idea pensar en un mueble para colocar bajo el lavamanos, pero que esté suspendido. Que como el inodoro, no llegue al suelo. De esta forma, conseguirás el almacenaje necesario para tus enseres de higiene, pero el baño parecerá algo más grande de lo que es.
El almacenaje lo puedes conseguir con alguna balda o estantería, en la que situar tus enseres de baño más bonitos, o con perchas que puedes colocar tras la puerta. Son unas grandes aliadas de los espacios pequeños, ya que ocupan poco espacio, pero aportan muchísima funcionalidad.
Sabemos que los baños de espuma te encantan y que relajarte con un baño caliente y una copita de vino al final del día sería tu rutina ideal. Pero desengáñate. Si quieres un baño funcional y aprovechar al máximo el poco espacio del que dispones en tu baño diminuto, deberás desechar la idea de tener bañera y apostar por la ducha.
No creas que con una ducha no podrás relajarte tanto como en una bañera. En el mercado existen duchas de hidromasaje que son una auténtica maravilla. Además, con la que está cayendo en temas de sequía es buena idea que te des duchas rápidas, para evitar el desperdicio de agua.
Para conseguir una perspectiva más amplia de tu baño, olvídate de las cortinas de ducha y apuesta por mamparas acristaladas. De esta forma, se verá toda la amplitud del espacio y no quedará cortado por una cortina opaca. Además, el cristal siempre ayuda a reflejar la posible luz que entra por las ventanas, consiguiendo una mayor luminosidad y, por tanto, una mayor sensación de amplitud. Por otro lado, es necesaria en un espacio de tan escasos metros cuadrados.