Quieres que tu casa luzca preciosa, y por eso, en ocasiones, eliges piezas de mobiliario o accesorios que estéticamente son una maravilla para la vista, pero funcionalmente son un horror.
Tu casa debe ser, ante todo, práctica. Es tu refugio y donde pasas gran parte de tu tiempo, cocinando, comiendo, durmiendo o trabajando. Debe ser un lugar que te facilite la vida y en el que te sientas cómodo. De nada te servirá un elegante sofá de diseño, si al sentarte es incomodísimo. O una espectacular lámpara de autor, si no ilumina lo suficiente.
La decoración requiere su tiempo. No puedes elegir todos los elementos que la componen de una sola vez, porque aunque en tu mente puedan resultar fantásticos, después la realidad puede ser muy diferente, si no eres un profesional.
Lo mejor es empezar paso a paso, eligiendo primero el color de las paredes, después los muebles más imprescindibles y, poco a poco, ir incorporando los otros elementos.
La decoración de toda tu casa debe ser coherente y tener una fluidez entre espacios. Por mucho que te guste el estilo rústico y el estilo industrial, si colocas un comedor rústico junto a un salón industrial, el diseño no resultará.
Por supuesto que puedes mezclar estilos, pero siempre que resulten coherentes entre ellos. Y, si no eres un profesional o estás asesorado por uno de ellos, evita conjuntar más de dos estilos. Puede ocasionar un auténtico batiburrillo estético.
Las paredes son el lienzo en blanco en el que debes empezar a diseñar, así que el color de ese fondo es muy importante. Es el que ocupa gran parte de la estancia y, por tanto, la base a partir de la cual el resto de elementos deben conjuntarse. Por eso, es mejor usar un color neutro, ya que te facilita la tarea decorativa.
Los colores muy llamativos, además de exaltar el ánimo, son mucho más difíciles de combinar con otros elementos. A no ser que tengas muchísimo cuidado en elegir los muebles y accesorios que incluirás en ese espacio.
Es una de las grandes olvidadas de la decoración. Compras los muebles, eliges los complementos, pero después escoges cualquier lámpara para iluminar una habitación. No lo hagas.
Una lámpara puede hacer que una estancia resulte un gran éxito o un gran fracaso. La iluminación amplía los espacios y es necesaria para la buena funcionalidad de tu casa. Procura poner diferentes puntos de luz. Uno general para iluminar toda la estancia y otras luminarias más puntuales para dar luz a espacios concretos.
La luz natural es una de tus mayores aliadas a la hora de diseñar un espacio. La necesitas como parte vital, así que evita taparla colocando frente a la ventana algún mueble que limite su entrada del exterior.
Del mismo modo, procura elegir cortinas que no sean muy opacas, porque no hay iluminación mejor que la luz natural. Por la noche, cuando ésta desaparezca, puedes correr unas cortinas más opacas para tener más intimidad, pero de día, la luz del sol, sí o sí, ha de estar presente.
No solo de los pasillos, colocando muebles grandes que te hagan pasar de lado por allí, sino en cualquier estancia. El espacio debe fluir. Eso de pasar de lado junto a la cama por la presencia de un armario es lo peor. Los pasos laterales déjalos para el gimnasio.
Y eso va hacia los dos lados. Es decir, es tan horrible colocar un mueble de grandes dimensiones en habitaciones pequeñas, como muebles diminutos en un gran espacio. Los muebles deben ser proporcionados a los metros cuadrados de los que dispones, porque si no puedes hacer que, un dormitorio pequeño, se vea más diminuto de los que es. Mientras que muchos muebles pequeños en un gran espacio, harán que la habitación parezca vacía.
No quiere decir que dejes de lado los estampados. Siempre son bienvenidos para aportar más alegría y color a tu decoración. Sin embargo, evita combinar varios estampados juntos. Aunque algunos expertos lo hagan, combinar cuadros con flores no siempre resulta.
Aunque el estilo minimalista sea lo tuyo, evita dejar una pared totalmente vacía. Parece que te hayas quedado a medias con la decoración. Añade alguna estantería, algún cuadro o algún aplique. La decoración de tu casa te lo agradecerá.